Este año la Navidad para nuestros ancianos de la parroquia nuestra Señora del Carmen fue distinto, pero lleno de mucho cariño por parte de varias personas que de una u otra manera han colaborado para que ellos tengan su canasta navideña, su comida y su regalo. A pesar de la situación de pandemia que se vive en todo el mundo el Señor ha sido providente porque ha puesto bienhechores que con esfuerzo y generosidad han colaborado para que este año también puedan tener sus canastas navideñas.
Es una gran alegría compartir con ellos pues lo necesitan más que nosotras; en este día teniendo presente los protocolos de salud y por el bien de todos solo participaron de la Eucaristía, recibieron su regalo y luego se le entrego sus comida y finalmente se les entrego su canasta navideña llena de mucho cariño y amor con que se le preparo para ellos con anterioridad por la comunidad. Solo nos queda dar gracias a Dios por poner personas generosas que abren sus corazones para compartir con los necesitados sin esperar nada a cambio.
Sor Esther Quinde C.
Superiora Local